sábado, 10 de diciembre de 2016

«El sujeto boscoso», de Vicente Luis Mora


Junto a los cuadros, en la pared de la Casa Museo, enmarcado en negro con cenefas esculpidas en la madera, un rectángulo de latón, y dentro, el movimiento de sombras de los visitantes, machas que solo se distinguen por el color de una vestimenta o el volumen del cabello. Pieza del siglo XVII, choca con las pinturas que le rodean. Un bodegón donde frutos parecen perder frescura cada día que pasa. Un retrato que no oculta ni un solo atributo del cansancio. Y sin embargo, frente a frente, el latón solo devuelve fisonomías de fantasma. Como se mira la realidad.